No es el momento de debatir si debe cambiar el sistema de medición de audiencias en los medios generalistas (prensa, radio y televisión). Hoy tratamos de analizar la información que tenemos sobre esa audiencia y cómo gracias a la incorporación de internet y sobre todo de las redes sociales se pueden tener datos más precisos y una mejor segmentación de las audiencias.
El impulso de las redes sociales en el análisis del usuario
Con el método de medición de audiencias sólo llegamos a tener una estimación de datos porque ni siquiera llegamos a saber si un programa de TV lo están viendo una, dos o más personas. Para el caso de los diarios se estima que cada uno lo leen “n” personas, cosa que no tiene por qué ser cierta. Y en el caso de la radio, pues no es lo mismo que la emisora la esté escuchando el taxista cuando está esperando en la parada (un oyente) a que lo estén escuchando él y sus clientes.
Desde que cadenas de televisión, radios y prensa tienen presencia en internet con webs más o menos conseguidas, ya se puede tener una idea más aproximada de la audiencia de estos medios. Ya no hablamos de una estimación a partir de un determinado número de audímetros, sino de datos reales que se pueden contrastar con el total de la audiencia. Esto teniendo en cuenta que no toda la población tiene acceso a internet y que, por tanto, hay cierto margen de error. Sin embargo las mediciones web en muchos casos no nos dan toda la información, nos falta el grano fino.
Pero gracias a la irrupción de las redes sociales se puede paliar esta falta de información y ya se pueden obtener datos fiables lo que debe redundar en una mejor información del público objetivo, número de éste y horarios. No es lo mismo dar por hecho que en prime time me van a ver 4 millones de personas como saber exactamente cuántos han sido, quiénes, tener sus datos sociodemográficos, gustos, aficiones, etc.
Gracias a la información que facilitan los usuarios con sus interacciones en las redes, los medios pueden tener información exacta en lo referente a su programación.
Dependiendo del programa de que se trate pueden ser miles los usuarios que interactúan con sus comentarios, opiniones, críticas, participaciones en concursos o encuestas, etc. Y esta información es lo mejor que puede tener un departamento de marketing.
Gracias a la información que facilitan los usuarios con sus interacciones en las redes, los medios pueden tener información exacta en lo referente a su programación, puesto que pueden conocer si una serie o programa gusta o no, cuál es el perfil sociodemográfico de los espectadores, qué espacios generan más debate, la opción de buscar relaciones (BIG DATA) y de aquí hasta el infinito.
Oro puro para los departamentos de marketing de emisoras, cadenas de televisión y diarios que pueden llegar sus promociones más allá de la gran pantalla, fuera de los horarios en que se emiten los programas o de los días en que se imprimen los periódicos. Y la opción de conocer datos reales para hacer un negocio más justo, lejos de las especulaciones, donde un spot en prime time se pague por la audiencia real y donde anunciantes ofrezcan sus productos a públicos más segmentados con la consiguiente mejora en el ROI y quizás un menor rechazo por parte del espectador.