El 90% de las grandes empresas españolas reconoce tener datos oscuros, de acuerdo con un estudio realizado por CommVault, en colaboración con la firma de análisis e inteligencia de mercado IDC.
La calificación de datos oscuros hace referencia al resultado de recabar información con poca visibilidad y a la cual resulta difícil acceder. Esta encuesta fue realizada a los encargados de la toma de decisiones TI de grandes firmas sobre gestión de la información en España.
“El dato se ha convertido en un activo esencial para los negocios. Bien sea para cerrar una transacción en tiempo real, colaborar de forma efectiva o innovar, cada vez es más importante poder acceder con agilidad al dato adecuado”, asegura Cesar Cid de Rivera, Director Regional Técnico de CommVault para el sur de Europa, quien además cree que “no siempre es fácil acceder a los datos, debido a la creciente complejidad de los entornos empresariales y al reto añadido de las normativas internas de las empresas, que muchas veces limitan este acceso, especialmente en el caso de los trabajadores móviles”.
En lo que respecta a la movilidad, más del 40% cree que es necesario limitar el acceso a la información sensible desde dispositivos portátiles, y más del 20% dice no dar acceso en absoluto para colaborar en movilidad, dado que es difícil asegurar la información. Tan solo el 30% afirma que su información en dispositivos móviles es accesible y tiene un alto nivel de seguridad.
Respecto a la variedad de los datos alrededor de entornos departamentales, la encuesta estima la heterogeneidad de departamentos con múltiples dueños de los datos y múltiples herramientas para los mismos. Más del 30% de las empresas participantes asegura contar con más de 5 herramientas para gestionar su entorno de datos, y casi el 50% dice contar con entre 2 y 5 herramientas. Los entornos de datos se refieren a Backup (físicos, virtuales), Archivado, Snapshot/Replicación, Gestión de Recursos de Almacenamiento (SRM), y eDiscovery.
En el caso de las multinacionales: la subsidiaria de cada país puede tener diferentes herramientas, en particular, cuando se trata de una empresa adquirida, los colaboradores externos tienen sus propias herramientas y cada país puede favorecer el uso de determinadas herramientas, o limitar el uso de otras por razones de uso, herencia tecnológica, e incluso por razones políticas.
Todo esto lleva a retrasos importantes a la hora de acceder a la información. De hecho, en torno al 65% de las empresas encuestadas reconoce tardar entre 1 y 3 días en obtener respuesta ante una solicitud de información.
A pesar de todas estas dificultades, los negocios son conscientes de que si no resuelven la complejidad que existe en relación con sus datos, corren el riesgo de no ser competitivos, por un lado, por la duplicidad de costes que se generan, pero sobre todo por el coste de oportunidad, al no aprovechar las posibilidades que se presentan con un mayor conocimiento o cercanía al cliente.
“Para afrontar los retos comentados con anterioridad, las herramientas tradicionales de gestión de información han quedado obsoletas (backup, archivado, snapshots, reporting, etc). Por tanto ahora es necesario pensar en protección de información moderna, una solución única para capturar, mover, retener, encontrar y recuperar datos de acuerdo a su criticidad y contenido”, concluye Cesar Cid de Rivera.