Si alguna vez has estado en cualquier negocio y has recibido un terrible correo electrónico en frío, ya sabes, ese tipo de correos electrónicos que parecen salidos de una plantilla de email de ventas mal escrita y no adaptada, deberías empezar a pensar en cómo lo harías tú si tuvieras de desarrollar tu propio negocio. Pues ten en cuenta que se puede trabajar con plantillas de correo electrónicos de ventas y aun así hacerlas personales en función del destinatario al que te diriges.
¿Cómo trabajar con plantillas de email?
Antes de nada, decirte que no me gustaría que te sumerjas en esto y comiences a enviar mensajes de email sin la preparación adecuada. Por ello, te recomiendo que antes de iniciarte en una herramienta de automatización de ventas, sigas esta serie de consejos:
1. Investiga a tu buyer persona en función de su modelo de negocio y sus necesidades
2. Cualifica tus prospectos mientras construyes una lista de contactos
3. Segmenta tu lista de contactos según unos criterios de segmentación relevantes (CRM)
4. Elige y personaliza tu plantilla de tu email de ventas correcta para cada lista o destinatario
5. Envía tu demo a tu lista de público objetivo interesado
6. Mide y decide
El email en frío perfecto
- La línea de asunto es personalizada y establece un enlace entre personas de ambas compañías.
- Nombre del destinatario tanto en el asunto como en el saludo de introducción del cuerpo de tu email.
- Incluye algún tipo de vínculo con la persona o empresa a la que te diriges con el fin de establecer un relato relevante.
- Menciona su empresa.
- Construye una verdadera propuesta de valor basada en un estudio previo de tu buyer persona y sus posibles necesidades partiendo de las carencias que has detectado.
- Incluye no más de dos enlaces en el cuerpo del email (enlace de tu web y llamada a la acción: clicar en un enlace si está interesada/o).
- Despídete con elegancia y educación.
- Inserta por defecto tu pie de firma con derecho a clicar en un enlace si no está interesada/o.
